Claves para una mejor gestión del agua: En busca de la sostenibilidad en medio del caos
Ya estamos otra vez. Una serie de circunstancias inesperadas se han cruzado para hundir los mercados del petróleo, causando innumerables problemas tanto a los operadores como a las empresas de servicios.
Estalla una pandemia vírica que paraliza las economías mundiales y, por tanto, la demanda de petróleo. Los continuos desacuerdos entre la OPEP, Arabia Saudí y Rusia sobre una estrategia de respuesta y el aumento de la producción hacen que los precios mundiales del crudo caigan hasta la franja de los 20 dólares, algo que no habíamos visto en décadas.
Para agravar la crisis en Norteamérica está la influencia del mercado en los últimos años, que llevó a los operadores a centrarse en el flujo de caja y la rentabilidad por encima de la producción y la disciplina de capital, con un acceso limitado a fondos propios y deuda adicional. Los operadores tendrán que colaborar estrechamente con los proveedores de servicios para volver a dar un paso adelante en la optimización del valor, la mejora de la eficiencia y la eliminación de los tiempos de inactividad y el despilfarro de recursos.
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